Por Nicolás Falanga.

Arsenal aplastó a Boca en la bombonera y se quedó con la punta a una fecha del final del campeonato.

Esta semana se hizo más larga que lo habitual. Arsenal se preparaba para enfrentar al puntero, con todas las esperanzas de lograr un triunfo que le permita tomar el liderazgo del torneo y llegar a la última fecha dependiendo de sí mismo.

Tal es así, que durante toda la semana uno tuvo tiempo para soñar el partido ideal con muchos descenlaces diferentes. Seguramente, el partido que realizó Arsenal estuvo dentro de esos finales que habíamos soñado.

Empezar ganando desde el primer minuto, no retrazarse y seguir insistiendo hasta conseguir el segundo. Los jugadores presionando en toda la cancha. En el segundo tiempo liquidarlo con una contra y hasta tener chances de hacer el cuarto o el quinto. Después de esto, habrá quienes cuestionen las cualidades de Arsenal?

Una cancha en la que Arsenal siempre tuvo que sufrir y apenas había logrado un triunfo, esta vez se enmudeció ante el despliegue del celeste y rojo. Actuaciones sobresalientes de la mayoría de sus jugadores, con Carbonero, Leguizamón y Zelaya en sus puntos más altos, construyeron una goleada histórica.

En una semana, Arsenal tendrá la oportunidad de quedarse con el campeonato local por primera vez en su historia. Esta noche, el equipo mostró que está preparado para afrontar tal responsabilidad, mientras Sarandí se prepara para recibir una fiesta como hace 10 años cuando conseguía el ascenso a Primera,